Shii’irainkaa wainpirai türa
Ja’yasü aapünüin weinshi matsapa ka’ikaa.
Ese canto de paraulatas
siempre sale por el atardecer.
Ja’yasü aapünüin weinshi matsapa ka’ikaa.
Ese canto de paraulatas
siempre sale por el atardecer.
José Ángel Fernández Silva Wuliana es una de las voces más representativas de la literatura wayuu. Nació el 23 de enero de 1961 en La Laguna del Pájaro, Distrito Páez del estado Zulia, siendo su lengua materna el wayuunáiki. Su poemario: Jayeechiirua jee Ojutuuirua Sümüinjatü tü Eiikaa Mma (Cantos y Pagamentos a la Madre Tierra), obtuvo el Segundo Lugar del Concurso Kuai Nabaida (el mar de arriba) de la Fundación Editorial el perro y la rana 2007. Actualmente labora en la Dirección de Literatura como Investigador en Lingüística adscrito a la Secretaría de Cultura de la Gobernación del Zulia. Es sociólogo y antropólogo, miembro de la Asociación de escritores del Zulia y miembro del Consejo Nacional de Educación, Culturas e Idiomas Indígenas, en representación de la nación wayuu ante la Dirección de Educación Indígena del MPPE. Ha publicado en bilingüe Nünüiki ka’ikai (Lenguaje del sol).
José Ángel, tus poemas giran en la reluciente voz de nuestros ancestros indígenas y se transfiguran desde tü Süsha’ajüle Wüin Nüsülekaa Wuchii (La Laguna del Pájaro).
Las Huellas del Waneetuunai
Por el contorno del montículo de A’yajuui (1)
nacen los riachuelos
que desembocan en el abrevadero de mi linaje
donde rugen felinos desesperados
tras las huellas del Waneetuunai. (2)
Una nube viajera ha sido la perfecta cómplice
para que el Epeyüi (3) consuma
sólo el corazón de su presa.
Ombligo de la Tierra
Somos los primeros habitantes
del ombligo de la tierra.
Somos perpetuos y felices viajeros
a la luz del sol y de la luna.
Después que Juya (4) fecundó abrojos sobre la tierra
Ma’leiwa (5) tapizó el suelo materno con flores amarillas
entonces surgieron las personas de modo colectivo:
¡Wullianaa! (6) Aparecen los felinos
¡Ja’yaliyuu! (7) Aparecen los caninos…
Ya pasamos el camino de los wayuu muertos.
(1) Médano ubicado en la Península de La Goajira venezolana.
(2) Personaje mitológico que camina al revés.
(3) Personaje mitológico felino que sólo consume el corazón de su presa.
(4) Personaje hipermasculino de la mitología wayuu, esposo de Mma (Madre tierra), proveedor de las buenas lluvias.
(5) Dios todopoderoso, el más grande, para los wayuu.
(6) Clan wayuu perteneciente al tótem de los felinos.
(7) Clan wayuu perteneciente al tótem del perro.
José Ángel, tus poemas giran en la reluciente voz de nuestros ancestros indígenas y se transfiguran desde tü Süsha’ajüle Wüin Nüsülekaa Wuchii (La Laguna del Pájaro).
Las Huellas del Waneetuunai
Por el contorno del montículo de A’yajuui (1)
nacen los riachuelos
que desembocan en el abrevadero de mi linaje
donde rugen felinos desesperados
tras las huellas del Waneetuunai. (2)
Una nube viajera ha sido la perfecta cómplice
para que el Epeyüi (3) consuma
sólo el corazón de su presa.
Ombligo de la Tierra
Somos los primeros habitantes
del ombligo de la tierra.
Somos perpetuos y felices viajeros
a la luz del sol y de la luna.
Después que Juya (4) fecundó abrojos sobre la tierra
Ma’leiwa (5) tapizó el suelo materno con flores amarillas
entonces surgieron las personas de modo colectivo:
¡Wullianaa! (6) Aparecen los felinos
¡Ja’yaliyuu! (7) Aparecen los caninos…
Ya pasamos el camino de los wayuu muertos.
(1) Médano ubicado en la Península de La Goajira venezolana.
(2) Personaje mitológico que camina al revés.
(3) Personaje mitológico felino que sólo consume el corazón de su presa.
(4) Personaje hipermasculino de la mitología wayuu, esposo de Mma (Madre tierra), proveedor de las buenas lluvias.
(5) Dios todopoderoso, el más grande, para los wayuu.
(6) Clan wayuu perteneciente al tótem de los felinos.
(7) Clan wayuu perteneciente al tótem del perro.
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